Itinerario musical para tus hijos de 3 a 7 años

La música se encuentra presente en nuestras vidas desde que nacemos y forma parte de nuestra vida diaria. Por eso, acercarse al mundo de la música supone acercarse más al ser humano y conocer mejor la cultura que nos rodea.
Además de enseñarnos nuevas formas de ver el mundo, la música nos mejora y nos permite expresarnos a través del ritmo y el sonido, haciéndonos disfrutar y reinventarnos. Aprender a tocar música es una experiencia que resulta muy enriquecedora a cualquier edad. Pero, ¿sabías que cuánto antes entramos en contacto con la música más beneficios nos ofrece?

Beneficios de aprender música entre los 3 y los 7 años

Las clases de música para niños de entre 3 y 7 años tienen por objetivo fomentar el aprendizaje y el desarrollo integral de los niños para permitir el desarrollo motor, cognitivo y emocional, así como crear un espacio en el que la música y el silencio generen una comunidad de aprendizaje que favorezca la expresión espontánea de la persona en todas sus facetas.
Proporcionar a tu hijo la oportunidad de aprender a tocar un instrumento tiene importantes beneficios para su desarrollo y que crezcan siendo más musicales. Favoreciendo su desarrollo cognitivo y ayudando a mantener su mente equilibrada a lo largo de toda la vida, reduciendo el estrés y las posibilidades de tener estrés y depresión.

Pero además, los niños adquieren habilidades motoras básicas a lo largo de los primeros siete años de vida, por lo que esta etapa resulta crucial para su desarrollo integral. Todo lo que aprendan durante esta fase se asimila con mayor facilidad. Con lo cual, en la etapa adulta les resultará más sencillo comprender y disfrutar de la música para cantar y tocar cualquier instrumento y mover el cuerpo al ritmo. Vivirán la música y esta formará parte de ellos.

A lo que hay que añadir que la música también permite fortalecer otros aspectos de vital importancia para el desarrollo, mejorando el aprendizaje, la coordinación motriz, la imaginación y la autoestima.

• La combinación de la voz, el lenguaje, el movimiento y la música de una manera integradora, junto con otras manifestaciones artísticas, como el teatro o la danza, es algo natural para la mente global de los más pequeños.
• Su curiosidad innata para percibir y expresarse mediante el sonido supone una magnífica oportunidad de fomentar las capacidades creativas, artísticas y sociales gracias al juego, la fantasía y la canción como principales elementos de comunicación y expresivos.
• A través de la enseñanza basada en la exploración, el autodescubrimiento, la composición y la improvisación, los niños tienen la posibilidad de aprender creando.
• El aprendizaje durante estos años establece los pilares de todo el aprendizaje posterior, tanto en el terreno de la música como en el de la danza.

¿Por qué es importante realizar una iniciación musical de calidad?

Un 15% de los niños posee una musicalización básica innata por impregnación, pero no disponen de los conceptos necesarios para recibir una formación de calidad adecuada. Si esperamos hasta que el niño cumpla 6 u 8 años para aprender a tocar un instrumento, el alumno tendrá que afrontar numerosos retos: cómo suena la melodía, cómo se lee la partitura, cómo tocar el instrumento elegido y de qué ritmo se trata.
En muchos casos, todas estas dificultades pueden generar cierto rechazo, lo que hace que muchos alumnos terminen abandonando las clases antes de haber podido llegar a disfrutar de la música.
Las clases de iniciación que impartimos en Tempo Musical destacan por su importante carga pedagógica desde los 3 años hasta el abordaje del instrumento.
Nuestra metodología se basa en el aprendizaje eficaz a través del descubrimiento, la creatividad y el factor humano y musical como un lenguaje más. A la edad de 6 años, los alumnos estarán tan familiarizados con la música que necesitarán exteriorizarla mediante un instrumento y son ellos mismos los que los pedirán.

¿Qué se hace en las clases de iniciación a la música?

Las clases de iniciación a la música para niños de entre 3 y 7 años son una formación ideal para que los niños entiendan el mundo sonoro que les rodea de forma entretenida, estimulando las capacidades artísticas, intelectuales y emocionales del niño.

En las escuelas de música como Tempo Musical, los juegos forman parte del aprendizaje, siendo el vehículo más eficaz para que los niños aprendan en la música y a través de ella, cuidando su formación corporal, vocal, rítmica, instrumental y auditiva.

• Divertirse con la música: apreciar y usar la música como vehículo de expresión y disfrute, así como desarrollar las capacidades creativas y expresivas mediante el componente lúdico. Una experiencia creativa y emocional única que llevarán consigo toda la vida.
• Aprender lenguaje musical para niños: identificar, descubrir y reconocer las distintas características del sonido y aprender a representarlas a través de las grafías convencionales y no convencionales.
• Desarrollo de aptitudes: escucha, sensibilidad auditiva, improvisación, entonación, ritmo, tempo interno, mecanismos psicomotrices y matemáticos, y memoria. Capacidades que pueden aplicarse también en otras áreas.
• Relacionarse con otros niños: en estas clases se busca despertar las actitudes de respeto y convivencia hacia los demás, participando en actividades en grupo.
• Cantar y bailar para expresarse: conocer nuestro cuerpo y usar el movimiento y la voz como forma de sensibilización y expresión musical. Comenzar el desarrollo de la percepción auditiva y la improvisación musical.
• Iniciarse en el ritmo y la melodía: empezar a adquirir de manera progresiva la interiorización y la asimilación del pulso y asimilar los pequeños diseños rítmicos y melódicos con la finalidad de desarrollar la memoria musical comprensiva.
• Tocar instrumentos musicales: identificar distintos instrumentos tanto auditiva como visualmente, además de poder tocarlos para experimentar la sensación de creación musical directa.
• Consolidar los conocimientos musicales para la continuación con un instrumento: conocimiento de notas, identificación de cuartos de tono, arpegios, escalas, aplicación al xilófono, transporte de notas, acompañamientos rítmicos en batería e improvisación sobre bases armónicas con conocimiento, cuadratura de canciones pedagógicas, reconocimiento de modos e intervalos, movimiento corporal natural, entonación de acordes, conocimiento de la música pedagógica, sinfónica y popular, y movimiento corporal natural, entre otras cosas.

¿Cuál es el itinerario musical que se sigue a partir de los 8 años?

A partir de los 8 años, los niños pueden comenzar el plan de estudios oficial en nuestro país: el Grado Elemental. Una formación musical que prepara a los alumnos para los estudios musicales posteriores en el grado profesional.
Engloba 4 cursos académicos y se organiza en distintas especialidades instrumentales, siendo las asignaturas comunes las de Instrumento, Coro y Lenguaje Musical. El alumno puede elegir entre distintas especialidades como guitarra, piano, percusión, clarinete, trompa, oboe, flauta travesera, viola, violín, violonchelo, fagot, trompeta, saxofón o contrabajo.
El avance irá en función del aprendizaje y no de la edad ni del tiempo que lleven estudiando música. Esto permite que los niños aprendan música paso a paso, de la manera más idónea.